Visibilidad: Los exhibidores deben destacar el producto para atraer la atención de los clientes.

Accesibilidad: Deben facilitar la interacción del cliente con el producto, permitiendo un fácil acceso.

Durabilidad: Los materiales utilizados deben ser resistentes para garantizar la durabilidad del exhibidor.

Flexibilidad: Deben adaptarse a diferentes tamaños y formas de productos para su exhibición.

Diseño atractivo: Un diseño atractivo y agradable visualmente puede aumentar la efectividad del exhibidor.

Espacio de marca: Deben proporcionar espacio para la promoción de la marca y la información relevante sobre el producto.

Facilidad de montaje: La instalación y desmontaje deben ser sencillos para facilitar la logística en el punto de venta.

Costo eficiente: Deben ser rentables y justificar su inversión en términos de retorno de la inversión.